¿Puede el mundo prescindir del plástico?
La respuesta está en un enfoque basado en la economía circular, el reciclaje, la reutilización y el uso de materiales reciclados para crear productos reciclables.
El impacto medioambiental del plástico está ligado a la forma en que lo utilizamos y gestionamos. Adoptando prácticas sostenibles, podemos reducir los residuos plásticos y preservar los recursos naturales. La economía circular fomenta el diseño de productos sostenibles y su reutilización, mientras que el reciclaje transforma los residuos plásticos en nuevas materias primas.
Aunque el mundo puede reducir significativamente su dependencia del plástico y promover alternativas sostenibles, es poco probable que pueda prescindir de él por completo. Es esencial adoptar un enfoque equilibrado encontrando formas de reutilizar, reciclar y gestionar responsablemente los plásticos, al tiempo que se fomenta la innovación y la adopción de soluciones más respetuosas con el medio ambiente.
Repensando nuestra relación con los plásticos, podemos construir un futuro sin comprometer la funcionalidad y la innovación.
Hanova lleva varios años comprometida con la economía circular, aumentando su uso de materiales reciclados y mejorando continuamente su gestión de residuos.